ambién en América Latina las crisis sociales se han visto exacerbadas por la pandemia. Los Estados son incapaces y tampoco están dispuestos a situar la vida y el bienestar de la población en el centro de las decisiones políticas. Un ejemplo de ello es Colombia, un Estado autoritario y neoliberal, donde las clases dominantes gobiernan mano a mano con la mafia.
Desde el inicio del confinamiento ha aumentado el asesinato de activistas, quienes se han convertido en blanco fácil para lxs actorxs armadxs debido a la inmovilidad en la cuarentena. El gobierno promulga medidas destinadas a rescates ad hoc de empresas del sector privado, mientras que los intentos de introducir una renta básica global se descartan como una tontería. Así mismo promulga diversas reformas laborales en contra de los intereses de la clase obrera y tan pronto como ésta sale a protestar, el gobierno responde militarizando las calles y declarando el estado de emergencia con el argumento de que las multitudes provocan infecciones masivas.
Ese mismo gobierno ahora promete vacunas gratuitas para toda la población, pero oculta que éstas mismas solo estarán disponibles a partir de 2022, año de elecciones presidenciales. Quienes puedan pagarán y obtendrán su vacuna este año; lxs más pobres se verán obligadxs a mendigarla a cambio de un voto, ¡adivinen por quién! La pandemia pone una vez más al descubierto la tragedia histórica del dogma neoliberal.
¡Pero la resistencia florece incluso y en especial dentro del autoritarismo! A finales de 2019 en Chile el gobierno quería introducir nuevas reformas neoliberales. Esto dio lugar a una movilización de protestas sociales sin precedentes que culminó en la convocatoria a un referéndum en octubre pasado para poner fin a la constitución heredada de la dictadura de Pinochet. La organización popular se ha mantenido viva a pesar de la actual emergencia sanitaria, articulándose en espacios solidarios para afrontar la desastrosa respuesta neoliberal a la crisis.
¡Feliz resistencia desde el Río Bravo hasta La Patagonia!
Unidas por la Paz - Alemania